martes, 6 de octubre de 2015

“El tiempo” podría estar terminándose según la ciencia


Los científicos han llegado a la idea radical de que el universo podría no terminar con una explosión, sino en un punto muerto con el que el tiempo podría estar literalmente acabando, hasta un día, se detuviese por completo.

La idea de que el tiempo podría acabarse en algunos miles de millones de años, donde todo se detendría, ha sido sugerida por los profesores José Senovilla, Marc Marte y Raül Vera de la Universidad del País Vasco, Bilbao, y la Universidad de Salamanca.

Energía Oscura

La motivación para este fin radical del tiempo es proporcionar una explicación alternativa a la “energía oscura”, la fuerza antigravitatorioa misteriosa que se ha sugerido para explicar un fenómeno cósmico que ha desconcertado a los científicos.

Hace una década, los astrónomos notaron que distantes supernovas (la explosión de estrellas en los mismos márgenes del universo) parecían moverse más rápido que aquellas más cerca del centro, lo que sugiere que se estaban acelerando a medida que se distanciaban a través del espacio.

La energía oscura fue sugerida como un posible medio de la alimentación de esta aceleración en la expansión del cosmos. El problema es que nadie tiene ni idea de lo que la energía oscura es o de dónde viene, y teóricos de todo el mundo han estado luchando por averiguarlo.

Resolviendo el enigma

La propuesta de este equipo elimina por completo la energía oscura. En su lugar, el profesor Senovilla sostiene que la aparición de la aceleración es causada por el mismo tiempo en desaceleración, como un reloj que necesita cuerda.

No se refieren a que la expansión del universo mismo sea una ilusión, sino que la aceleración de esta lo sea. Si el tiempo se ralentiza gradualmente pero ingenuamente seguimos usando nuestras ecuaciones para obtener los cambios de la expansión con respecto a ‘un flujo estándar de tiempo’, entonces los modelos simples construidos mostrarían que se lleva a cabo “un ritmo acelerado efectivo en la expansión”.

Desplazamiento hacía el rojo

Mientras que el cambio sería infinitamente lento desde una perspectiva humana ordinaria, desde la gran perspectiva de la cosmología, en la que los científicos estudian la luz antigua de soles que brillaban miles de millones de años atrás, esta ralentización temporal podría medirse fácilmente. Los astrónomos son capaces de discernir la velocidad de expansión del universo utilizando la técnica denominada “desplazamiento hacía el rojo”.

El principio es el mismo que el de una sirena de ambulancia que se hace mayor, ya que viene hacia el oyente, pero menor a medida que se aleja. Del mismo modo, una estrella que se aleja aparece más roja que una que se acerca hacia nosotros.

Sin embargo, la precisión de estas medidas depende del tiempo invariable de todo el universo. Si el tiempo en efecto está desacelerando de acuerdo con esta nueva sugerencia de nuestra dimensión temporal solitaria, se está convirtiendo poco a poco en una nueva dimensión del espacio. Por lo tanto las estrellas distantes, antiguamente vistas por los cosmólogos se verían, desde nuestra perspectiva, como si estuvieran acelerando.

Teoría de Supercuerdas

El grupo basa su idea en una variante particular de la teoría de las supercuerdas, la llamada teoría del todo, en la que nuestro universo se limita a la superficie de una membrana flotando en un espacio de dimensiones superiores.

Según esto, en cierto número de miles de millones de años, el tiempo dejaría de ser tiempo y todo se detendría como una instantánea, para siempre. Por supuesto todo esto asumiendo que solo hubiese una dimensión de tiempo. Itzhak Bars de la Universidad del Sur de California en Los Ángeles ha presentado la sugerencia extraña de que hay dos dimensiones de tiempo. Algo que definitivamente no se incluye en este modelo.

Pero aunque la teoría parezca descabellada, no le falta apoyo. El profesor Gary Gibbons, cosmólogo de la Universidad de Cambridge, cree que la idea tiene mérito. Se creé que el tiempo surgió durante el Big Bang, y si el tiempo puede surgir, también puede desaparecer, sería sólo el efecto contrario.

lunes, 20 de abril de 2015

En un manuscrito medieval francés, al Maestro Yoda encontrado han


¿Puede ser que un manuscrito medieval, escrito e ilustrado alrededor del año 1340, contenga una imagen de un personaje de la saga 'La Guerra de las Galaxias'? Es lo que se pregunta la prensa británica después de que el diario The Guardian haya entrevistado al conservador de la British Library o Biblioteca Británica, Julian Harrison. En efecto, en una de las páginas de Las decretales de Gregorio IX, también conocido como Decretales de Smithfield, editadas por Raimundo de Peñafort en Toulouse, Francia, entre los años 1300 y 1340 y conservadas en Londres, se puede ver un extraño personaje de color verdoso, túnica y largas orejas puntiagudas, que recuerda mucho al popular personaje del maestro Yoda. "Me encantaría decir que es Yoda dibujado por un viajero en el tiempo", dice Harrison, "pero en realidad es una ilustración relativa a la historia bíblica de Sansón". No obstante, el conservador afirma que no se sabe qué representa, aunque sí que el artista "tenía una imaginación desbordante". El libro está repleto de ilustraciones extrañas, como animales híbridos. Las decretales son colecciones de cartas papales con indicaciones acerca de la doctrina y ley de la Iglesia. El libro está digitalizado y se puede consultar y ver totalmente gratis en Internet.

Escafismo, tortura empleada por los persas



El Escafismo (en inglés Scaphism), también conocido como el método de tortura de la artesa o de la barca,1 se supone fue un antiguo método de ejecución practicada por el Imperio Persa en el año 401 A.C. diseñada para infligir una muerte por tortura y que fue descrito por los archienemigos de los Persas, los Griegos. El nombre proviene del griego σκάφη, skáphe, que significa "vaciado". Este consistía en meter a la víctima en un cajón de madera con cinco agujeros por los cuales sacaba la cabeza, las manos y los pies. Los verdugosuntaban estas partes del cuerpo con leche y miel para atraer a ellas a las moscas y otros insectos. El individuo que sufriría la condena era anteriormente alimentado con estos alimentos, algunas veces estando en mal estado. Ésto provocaba diarreas en la persona, lo que atraía a muchos insectos que empezaban a alimentarse de las heces del condenado, para luego ir ingresando en el ano de este y, por consiguiente, a dejar sus huevos dentro de él. Por lo que esa persona se convertía en comida para insectos y moría al cabo de unos días.



Plutarco comenta en su obra Vidas Paralelas:

Mandó el rey Artajerjes II, pues, que a Mitridates se le quitara la vida, haciéndole morir enartesado, lo que es en esta forma: tómanse dos artesas hechas de madera que ajusten exactamente la una a la otra, y tendiendo en una de ellas supino al que ha de ser penado, traen la otra y la adaptan de modo que queden fuera la cabeza, las manos y los pies, dejando cubierto todo lo demás del cuerpo, y en esta disposición le dan de comer, si no quiere, le precisan punzándole en los ojos; después de comer le dan a beber miel y leche mezcladas, echándoselas en la boca y derramándolas por la cara: vuélvenle después continuamente al sol, de modo que le dé en los ojos, y toda la cara se le cubre de una infinidad de moscas.
Como dentro no puede menos de hacer las necesidades de los que comen y beben, de la suciedad y podredumbre de las secreciones se engendran bichos y gusanos que carcomen el cuerpo, tirando a meterse dentro. Porque cuando se ve que el hombre está ya muerto, se quita la artesa de arriba y se halla la carne carcomida, y en las entrañas enjambres de aquellos insectos pegados y cebados en ellas. Consumido de esta manera Mitridates, apenas falleció el decimoséptimo día.


También se ejecutaba este suplicio metiendo al sentenciado dentro del vientre de un caballo u otro animal corpulento y dejando fuera las cinco partes del cuerpo mencionadas. De este modo, el reo quedaba entregado a los horrores de una doble putrefacción.

Prácticas similares

Richard Sair se refiere a un caso en la moderna China en el que un hombre fue encadenado en el exterior, donde varios mosquitos los picaron.


En la obra de Shakespeare The Winter's Tale, el pícaro Autolycus le dice al pastor y a su hijo que debido a que Perdita se ha enamorado del príncipe, su padre adoptivo será apedreado, mientras que su hermano adoptivo será sometido a el siguiente castigo:
Tiene un hijo que será desollado vivo; luego, untado de miel y expuesto ante un nido de avispas. Se le dejará allí hasta que sea tres cuartos y medio muerto; entonces se le hará volver en sí con aguardiente u otra cualquier infusión cálida, y después, sangrando como esté, en el día más caluroso que anuncie el almanaque, se le colocará contra una pared de ladrillos, donde el sol le mirará con su disco más meridional y donde le mirará el sol mientras las moscas le picarán hasta que siga la muerte.

lunes, 9 de febrero de 2015

El Papa Juan XXIII conversó veinte minutos con un Extraterrestre


El hecho ocurrió una noche de julio de 1961 cuando Juan XXIII, también llamado Papa Bueno, se encontraba paseando junto con el citado secretario, en los jardines de la locación veraniega de Castel Gandolfo.

Cuenta el acompañante, que luego de unos minutos de paseo, ambos observaron en el cielo una extraña nave de forma oval, muy luminosa, de color azul y ámbar. 

Al parecer, la nave sobrevoló por unos momentos sobre las cabezas de los paseantes para luego aterrizar justamente en el jardín de la referida casa.

Según el secretario, en ese momento, un ser con forma humana aunque rodeado de un aura dorada y de orejas alargadas, salió de la nave. Tanto Su Santidad como el secretario se arrodillaron y ambos, aún sin saber exactamente qué estaban viendo, comenzaron a rezar creyendo a lo mucho, que se trataba de un hecho celestial.

Luego de unos minutos, el Santo Padre decidió acercarse a la criatura y, según narra el secretario, logrando entablar una conversación con él por un tiempo aproximado de 20 minutos.

Una vez terminada la reunión el Santo Padre volvió adonde se encontraba su secretario dándole el mensaje siguiente:

"Los hijos de Dios están en todas partes; aunque algunas veces tenemos dificultades en reconocer a nuestros propios hermanos"

Dicho esto no se volvió a hablar más del tema, y por supuesto, el Papa nunca reveló, aparentemente ni siquiera a sus más fieles colaboradores, lo que habría conversado con ese ser.

viernes, 5 de diciembre de 2014

Wendigo: El enigma tras las horribles y poderosas criaturas caníbales del hielo


El wendigo es una combinación de criatura y espíritu. Se concibió en el seno de la cosmovisión de las tribus algonquinas o pueblos nativos de Canadá. 

Todo comenzó durante el invierno de 1896 cuando Félix Auger, conocido como Napanin, salió junto con su esposa e hijos para visitar a su padre en la reserva indígena de Trout Lake en Alberta, Canadá. Para llegar debían atravesar casi 50 kilómetros en inhóspitos bosques. La salud de Napalin parecía estar bien, no obstante, en la segunda noche de travesía comenzó a comportarse de manera extraña. Decía ver horribles criaturas en la oscuridad y que sus voces le pedían que matara a uno de sus hijos y lo devorara.

Los informes dados a conocer en abril de ese año, por el diario “Edmonton Bulletin”, consignan que durante enero Napanin llegó a su destino. Asimismo, el protagonista de esta historia relató a unos trabajadores escoceses el martirio que había sufrido en el bosque para contenerse de no hacer daño a su familia. Decía que escuchaba las voces y visiones debido a que se sentía poseído. Según cuenta paulatinamente su condición se degradó; sufría alucinaciones, ataques de ira y su cuerpo rechazaba cualquier alimento. Testigos aseveraron que además presentó síntomas inexplicables como el crecimiento desmedido de su cuerpo y fuerza, sumado a que decía sentir que su corazón se convertiría en hielo sólido.

El mito menciona que las personas que ingresan en este misterioso bosque logran ser inducidos para sucumbir ante los instintos más básicos de la naturaleza. Se trata de criaturas espantosas que relacionan el espíritu primitivo que alberga en cada persona, para que nazca su lado más salvaje y brutal. El artículo del Edmonton Bulletin titulado “A Wenhtigo Murdered” señala que, en su arrebato, Napanin logró librarse de sus ataduras y atacó salvajemente a quienes lo rodeaban.

Finalmente lo asesinaron: cortaron su cabeza, prendieron fuego al cadáver y lo sepultaron bajo una enorme pila de leña. Varias semanas después, nadie se atrevía a internarse en el bosque pues temían la resurrección y venganza del diabólico ser.

Pese a que comúnmente se trata de relacionar al wendigo, con el pie grande americano, estos sólo tienen en común su afición a los bosques boreales. En realidad el wendigo es una combinación de criatura y espíritu. Se concibió en el seno de la cosmovisión de las tribus algonquinas o pueblos nativos de Canadá que transmitieron de generación en generación a través de la tradición oral. En estos relatos se les representa bajo diferentes formas físicas.

Las etnias como los algonquinas le han llamado “espíritu maligno que devora a la humanidad”. Para estas tribus, se trata de caníbales sanguinarios cuyo incontrolable apetito los lleva a destrozar aldeas y a asesinar familias completas. Los indígenas los describen como seres altos y famélicos que vagan desnudos por las noches a través de los bosques congelados. Su piel grisácea se halla pegada a los huesos, pero pese a esta constitución poseen una fuerza sobrehumana. Sus ojos son grandes y amarillos sumado a que su corazón está hecho de hielo. Por eso, sólo derritiéndolo se puede aniquilar al wendigo y evitar que resucite.

La leyenda

Durante finales del siglo XIX fue tal la creencia en estas criaturas que se registró una gran cantidad de apariciones en los bosques, e incluso se reportaron casos entre la población. Es fácil suponer que la gente se hallaba aterrorizada ante la perspectiva de ser víctimas de una de estas criaturas o, peor aún, convertirse en una.

No obstante, el caso de Napanin, citado al comienzo de la nota, no fue el único. Existen más de media docena de casos documentados de asesinatos caníbales en las comunidades indígenas. El investigador de la universidad de Alberta, Cánada, el doctor Nathan D. Carlson, quien se ha dedicado a analizar estos registros wendigos desde hace varios años, señala en el artículo “Reviving Witiki: an Ethnohistory of ´Cannibal Monsters´in the Athabasca District of Norther Alberta, 1878 – 1910” que, en estos casos de antropofagia, el hambre y sobrevivir no representaban una variable de peso para recurrir a esa opción. Un ejemplo de esto es el protagonizado por un cazador de Alberta, Swift Runner, quien en el invierno de 1878, estando a unos cuantos kilómetros de distancia de los suministros de alimentos destinados para emergencia, prefirió matar y comer a su esposa y cinco hijos.

“Mucho de los embrujados eran auxiliados por curanderos, sacerdotes o médicos, pero hubo casos en los que estos métodos fallaban y los pacientes, creyendo estar a punto de transformarse, rogaban que se les matara. Al ver la gran cantidad de actos caníbales que se reportaban en la zona, especialistas decidieron abordar el asunto el investigador y psicólogo Morton Techep, luego de estudiar cerca de 70 casos, describió una condición médica calificada hasta nuestros días “psicosis por wendigo” o “psicosis wendigo”.

El investigador la definió como una enfermedad étnica, típica de las tribus de Canadá, que se manifiesta por una preferencia por la carne humana, insomnio, anorexia y alucinaciones. Del total de casos que estudió, 44 incluyeron genuinos actos de canibalismo y en 36 de ellos las víctimas fueron miembros de la misma familia del asesino.

Debido a la zona donde se desarrollaron las tribus algonquinas, señala Carlson, la escasez de alimentos durante el invierno era frecuente. Por ello, el canibalismo en algún momento, pudo ser una práctica común. Actualmente la creencia en estos seres ya no es tan fuerte.

jueves, 20 de noviembre de 2014

La tercera guerra mundial comenzaria en el 2015


De acuerdo con John Titor, en el año 2015, empezaría la Tercera Guerra Mundial: 

En el 2015, Rusia lanza un ataque nuclear contra las grandes ciudades de Estados Unidos (que eran «el otro lado» de la guerra civil desde mi perspectiva), China y Europa. Los Estados Unidos contraatacaron. Las ciudades de Estados Unidos quedaron destruidas junto con el Imperio Americano Federal AFE... pero nosotros (dentro del país) ganamos. La Unión Europea y China fueron destruidas.



Titor se refiere a este intercambio como el «Día N». Washington D. C. y Jacksonville, Florida, fueron específicamente mencionados como blancos. Después de la guerra, Omaha, en Nebraska, resultó ser la nueva ciudad capital. 

Titor da vagas referencias acerca de las motivaciones exactas y las causas de la Tercera Guerra Mundial. En este punto él dice que fue caracterizada por «problemas fronterizos y de superpoblación» pero también apunta a los conflictos presentes entre los árabes y los judíos como los desencadenadores de la Tercera Guerra Mundial:

La verdadera disrupción de los eventos mundiales empezó con la desestabilización de oriente como resultado de la degradación de la política externa consistentemente... La población Judía de Israel no estaba preparada para una verdadera guerra ofensiva. Ellos estaban preparados para la última defensa. Al pedir ayuda a Occidente para Israel, fue lo que hizo que sus vecinos tuvieran confianza para atacar. El último recurso defensivo de Israel y sus ofensivos vecinos árabes fue el uso de armas de destrucción masiva. En el gran esquema de las cosas, la guerra del medio oriente es parte de lo que viene, no la causa.



Corea del Norte amenazaría al país estadounidense con guerras nucleares que en el 2015 serían efectuadas por Rusia. 

Después se crea una plaga en el año 2030 conocida como el nuevo sida que tiene resultados catastróficos matando a la mayoría de la población humana.

martes, 11 de noviembre de 2014

El origen de los zombis: la triste historia real detrás del mito de los 'muertos vivientes'

El fenómeno zombi actual se aleja mucho del origen real del mismo

Son un fenómeno de masas. Los zombis llevan más medio siglo entre nosotros como protagonistas de infinidad de películas y series de TV. Basta con mencionar a George Romero, la saga Resindent Evil o echar un vistazo a la serie The Walking Dead para comprobar lo comerciales que resultan los muertos vivientes para la industria del entretenimiento. 

El origen del fenómeno zombi, tal y como lo contemplamos hoy (lo que podríamos denominar 'zombi moderno') se remontaría a mediados del s. XX y estarían englobados en un contexto audiovisual dentro del género de cine de terror (algo así como variantes de Drácula o Frankenstein). Sin embargo, los primeros 'muertos vivientes' de las historia de los que se tiene constancia, y que se asimilarían a lo que hoy entendemos por zombis, se remontan a una realidad mucho más cruel, la de los esclavos. 

Según detallan desde el portal Live Science, la historia real de los zombis se remonta mucho más atrás de la cinta de Romero de 1968 (Night of the Living Dead). El triste comienzo del mito data del Haití del siglo XVII y XVIII, cuando los esclavos africanos eran llevados allí para trabajar hasta la muerte en las plantaciones de azúcar. 

Desde entonces y hasta ahora, la noción de zombi ha formado parte de la comunidad haitiana. La creencia es que, a través de la magia o el veneno, un hechicero es capaz de hacer enfermar hasta la muerte a una persona a la que, tras ser enterrado por la familia, hace revivir. Dicha persona queda sometida a la voluntad de quien le ha hecho volver a la vida. Una idea que subyace en el folclore zombi: la ausencia de voluntad propia del 'muerto viviente'.

El salto de la cultura haitiana al cine de EE UU

Fue en 1932 cuando se produjo el salto de la cultura haitiana a la industria del entretenimiento. EE UU 'adoptó' a los zombis como nuevo componente para el cine de terror con la cinta White Zombie protagonizada por Bela Lugosi y Madge Bellamy. 

Se dice que, en parte, también estaba inspirada en un diario de viaje del periodista William Seabrook, quien en el libro Jungle Ways llegó a describir el sabor de la carne humana como "algo muy parecido a la carne de ternera". Un dato que podría explicar qué hace a los zombis del cine y la TV buscar carne humana como objetivo. 

Con los años, las películas sobre muertos vivientes empezaron a multiplicarse, muchas con la temática del vudú haitiano como fondo de la historia. 

Sin embargo, a mediados del siglo XX, la ciencia ficción empezó a desvirtuar el origen del fenómeno zombi hacia otros derroteros como los experimentos científicos, los virus, etc. Hasta llegar a lo que hoy entendemos como zombis.

lunes, 6 de octubre de 2014

FBI admite la visita de "seres de otras dimensiones"


La noticia tiene una fuente impecable: los propios archivos del FBI (Federal Bureau of Investigations, Oficina Federal de Investigaciones)

La primera sorpresa es que el FBI, al mejor estilo «X-files», dedicaba gran atención al fenómeno OVNI. Por cierto, esto confirma la vieja sospecha que tenían los investigadores que muchas películas de ciencia ficción en realidad están basada en hechos reales, ya sea en «filtraciones» dadas por el mismo FBI a propósito para ir concientizando a la población, ya por agentes o ex agentes que creen injusto que se prive a la opinión pública del conocimiento de estos secretos. Uno puede ser un poco más incisivo y preguntarse si, después de todo, las historias creadas desde la ficción no lo serán para generar un determinado prejuicio en los actores sociales, para cubrirse la espaldas de futuros desaguisados en el manejo de esa información.

Ciertamente, uno no puede creer que Edgar Hoover, a la sazón Director del FBI cuando los hechos de los que hablaremos ahora ocurrieron, estuviera muy preocupado en la «justicia» de respetar el derecho de la opinión pública a enterarse. Justo él, ultraconservador y reaccionario, un verdadero Torquemada de quien pensara distinto. Pero la cuestión es que en el año 2011 se supo que la policíaca agencia había hecho ingresar en la categoría de «desclasificados», un informe elaborado en julio de 1947 por un agente especial del FBI, un Teniente Coronel —cuya identidad, en aras de la «seguridad nacional» es borrada en el informe, y por instrucción directa del omnipotente Hoover, basado en las entrevistas a un testigo de apariciones OVNI que, en base a sus experiencias de contacto con estas inteligencias no humanas, tenía bastante que decir.

Descarga de documento completo en este enlace (en ingles):

https://mega.co.nz/#!j8g0HThb!8kGXZO7p4H3u1BKj19zosJSlHc5ELJtcqLGu_tDxL1Q

( ‘THE FLYING ROLL’ MEMO (7,2 MBs)
Descripción de archivo: Archivo del FBI que habla sobre un origen interdimensional de los platillos voladores.)

A continuación una traducción de los puntos que se señalan en la captura del documento que se muestra sobre estas líneas:

-Algunos de los discos son tripulados, otros son controlados remotamente.
-Su misión es pacífica. Los visitantes tienen contemplado instalarse en este mundo.
-Los visitantes son humanoides, pero de una altura muy superior.
-NO SON gente desencarnada de la Tierra, provienen de su propio mundo.
-NO vienen de otro «planeta» como solemos referirnos, sino más bien de un planeta etéreo que se interpenetra con el nuestro y no podemos percibir.
-Los cuerpos de los visitantes, y también sus naves, se materializan automáticamente al ingresar en cierto rango vibratorio de la materia.
-Los discos poseen un tipo de energía radiante, o rayo, que puede desintegrar fácilmente a cualquier nave agresora. Son capaces de reingresar al etéreo a voluntad y desaparecer de nuestro campo visual sin dejar rastro.
-La región de la cual ellos provienen NO es el «plano astral», sino que corresponde al Lokas o Talas. Aquellos estudiosos de temas esotéricos comprenderán estos términos.
-Es poco probable que podamos establecer una comunicación por radio con ellos, pero posiblemente sí se pueda por radar si un sistema de señales puede concebirse para ese aparato.

Según el ponente, estaríamos siendo visitados, entre otras especies, por una no proveniente de otros planetas sino de «otras dimensiones». En puridad, de un plano etéreo coexistente con nuestro universo físico, entidades que al materializarse aparecían como gigantes traslúcidos…

Realmente pensaríamos estar ante el relato de un fantasioso pero debe atenderse que el hecho debe haber tenido suficientes puntos coherentes para movilizar una investigación del FBI, puntillosos —eso hay que reconocérselos— a la hora de justificar la inversión y gasto de sus recursos. Bien, el relatante continúa exponiendo que estos seres (a los que se llama «los errantes») emplearían para su desplazamiento vectores energéticos que se interpretarían como los (así llamados en ese entonces) «platillos volantes». Su objetivo sería «pacífico»… si es que pueda considerarse «pacífico» lo que habrían manifestado (suponemos que telepáticamente) al testigo: quedarse en el planeta, sin interferir con nosotros.
¿Qué decir de este informe? Si bien los «reportes OVNI» —como podrá comprobar cualquiera que se tome el trabajo de consultar los archivos del FBI— eran entonces (como ahora) muy comunes, ignoramos si este cariz tan particular quedó sólo en eso o tuvo alguna continuidad en el tiempo. Prestemos atención que si en el año 2011 se liberaron reportes de 1947, si hubo otros posteriores —o ampliaciones posteriores de la investigación— recién serían liberados este año entrante o los siguientes… si es que lo son y no se considera que su contenido o resultados afectan la «seguridad nacional».
Por lo pronto, es nuestro menester obtener toda pista que enriquezca la percepción de un hecho, por sí mismo, extraño dentro de la misteriosa naturaleza del fenómeno OVNI.


miércoles, 17 de septiembre de 2014

Ishii Shiro y la Unidad 731


Al terminar la Primera Guerra Mundial en 1918 los médicos de ejército japonés comenzaron a estudiar los productos químicos y biológicos usados durante los combates en Europa. Concluyeron que eran armas capaces de producir devastaciones masivas en los ejércitos enemigos, pero deshonorable. Sin embargo, esta actitud cambiaría tras el viaje de un desconocido médico a occidente.

Ishii Shiro fue enviado a Europa con el cargo de agregado militar, viajando durante dos años en diversas ocasiones a América, familiarizándose con las investigaciones biológicas de los países Occidentales. A su regreso a Japón se consagró a promover, investigación y fabricar armas biológicas. Su teoría se basaba en que la guerra moderna sólo podría ser ganada con el uso de la ciencia y su capacidad para producir armas de destrucción masiva.

El 18 de septiembre de 1931, Japón ocupó el todo del nordeste de China. Ishii y su unidad para investigación bacteriológica se estableció al norte de Manchuria, en donde el ejército de Kuantung podía mantener un suministro ilimitado de prisioneros chinos para realizar toda clase de experimentos humanos.

En la campaña del 13 de agosto de 1937, y ante la atenta mirada de las armadas occidentales, el ejército japonés usó gas venenoso contra las tropas chinas con escasos éxito

Estados Unidos, ante estos resultados no tomó el programa biológico japonés en serio, posiblemente porque Japón estaba muy lejos y no podría lanzar un ataque masivo contra el continente americano. Los informes de la época, sorpresivamente, también afirman que los militares estadounidenses creían que los japoneses serían incapaces de desarrollar sofisticadas armas biológicas sin la ayuda de “hombres blancos”.

La enorme distancia que separaba a Japón de Estados Unidos parecía su protección más segura, pero los japoneses habían ideado un sistema increíblemente sencillo y barato de alcanzar el continente enemigo. Varios sumergibles nipones ya habían lanzado globos con cargas incendiarias sobre las costas de Estados Unidos y Canadá. Los aliados los consideraban como un arma ridícula que no obtenía ningún resultado, sólo producía pequeños incendios. Aquellos incendios eran observados desde los sumergibles anotándose el éxito o el fracaso de alcanzar la costa, de tal modo que Ishii y sus hombres pudieran calcular la cantidad de globos que se debían lanzar con armas biológicas para que pese a los fallos su resultado fuera letal. Los globos “Fugo” resultaron un peligro inesperado.

Sólo una semana después de Japón se rindió, el coronel Sanders se encontraba entre el primer grupo de americanos que aterrizó en Japón. Su misión era localizar la máquina de guerra biológica japonesa y al propio Ishii lo más pronto posible. En septiembre de 1945, Sanders descubrió que la Unidad 731 estaba envuelta en horrorosos experimentos con humanos.

Por fin fue localizado Ishii Shiro. Intentando ocultarlo a los soviéticos se le declaró muerto, se publicó la noticia en los periódicos y se simuló un entierro en su pueblo natal. El interrogatorio de Ishii duró desde 17 de enero al 25 de febrero de 1946.

Ishii cambió sus conocimientos no sólo por su indulto y el de sus hombres; también por que fuera borrado por completo su historial y pudiera llevar una vida normal. Shiro Ishii tras su estancia en Estados Unidos volvió al Japón recibiendo los máximos honores.

Experimentos con seres humanos similares a los realizados por el grupo de Ishii, se habían condenado como crímenes de guerra por el Tribunal Militar Internacional en el juicio contra los criminales de guerra nazis, comenzado en Nüremberg el 30 de septiembre de 1946. Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos perdonó a los científicos japoneses a cambio de sus secretos en la guerra bacteriológica amparándose en la excusa de que se aproximaba un posible enfrentamiento con la Unión Soviética.


Experimentos realizados por la unidad 731.


Disección de personas vivas para experimentos de laboratorio y en ocasiones asesinados simplemente para documentar la muerte. El número de personas utilizado para este fin iba de las 400 a las 600 cada año.
A partir de la segunda mitad de 1940, las tropas agresoras japonesas empezaron el uso a gran escala de armas bacteriológicas, y desencadenaron todo tipo de enfermedades infecciosas como el cólera, el tifus, la pestilencia, ántrax, difteria y bacteria de la disentería.

Congelaban a los prisioneros y los sometían a técnicas de deshidratación severas y documentaban la agonía.
Los exponían a bombas para aprender a curar a los heridos japoneses. Bombardearon poblados y ciudades chinas con pulgas infectadas y dieron a los niños golosinas con ántrax. Después entraban para comprobar los daños a la población y se llevaban enfermos todavía vivos para abrirlos y perfeccionar el arma.
Contaminaron las fuentes de agua.

Algunos de los experimentos llevados a cabo allí incluían inyectar a los sujetos con bacteria causantes de la peste bubónica producidas en moscas infectadas, para luego registrar la evolución de la enfermedad e incluso disecarlos en estado consciente.

Los japoneses no dejaron nada sin probar: hongos, fiebre amarilla, tularemia, hepatitis, gangrena gaseosa, tétano, cólera, disentería, fiebre escarlata, ántrax, muermo, encefalitis de las garrapatas, fiebre hemorrágica, difteria, neumonía, meningitis cerebroespinal, enfermedades venéreas, peste bubónica, tifus, tuberculosis y otras endémicas de China y Manchuria. Realizaron pruebas con cianuro, arsénico, heroína, con veneno de serpientes y de pez erizo. En este programa murieron más de 10.000 personas.

Algunos murieron como consecuencia de las investigaciones. Otros fueron ejecutados cuando quedaron tan débiles que no podían continuar en la Unidad 731 y en otros tantos puntos se hicieron tests con insectos, y todo tipo de gérmenes. Se probaba la resistencia humana al botulismo, ántrax, brucelosis, cólera, disentería, fiebre hemorrágica, sífilis y también la resistencia a los rayos X.


martes, 2 de septiembre de 2014

Ashley, la ciudad que desapareció


En algún punto en la noche del día 16 de agosto del año 1952, la pequeña ciudad de Ashley dejó de existir. Justo a las 3 horas con 28 minutos de la madrugada del 17 de agosto de 1952, un terremoto de magnitud 8.4 fue registrado por los dispositivos del Servicio Geológico de los Estados Unidos. El terremoto pudo sentirse en todo el país, principalmente en la zona oeste. Según las estimaciones de los especialistas, el epicentro tuvo lugar en la ciudad de Ashley en el estado de Kansas.


Cuando los cuerpos de emergencia y rescate llegaron a donde deberían estar las construcciones de la comunidad agrícola, solamente encontraron un grieta en el suelo desde la que salían enormes llamaradas. Con cerca de un kilómetro de largo y más de 500 metros de ancho, su profundidad nunca fue determinada.


Luego de doce días, los equipos de búsqueda estatal y local para los 679 habitantes de la ciudad de Ashley fueron retirados del lugar, la orden la dio el propio gobernador del estado de Kansas a las 21 horas con 15 minutos del 29 de agosto de 1952. El total de los 679 residentes fueron dados por muertos. A las 2 horas y 27 minutos de la madrugada del 30 de agosto de 1952 otro terremoto de magnitud 7.5 fue registrado por el Servicio Geológico de los Estados Unidos. Nuevamente, los especialistas determinaron que el epicentro había ocurrido donde antes se encontraba la ciudad de Ashley. Cuando los equipos de inspección llegaron para investigar a las 5 horas con 32 minutos del mismo día, informaron que la fisura se había cerrado.

En los ocho días que antecedieron al desaparecimiento de la ciudad y sus 679 habitantes, una serie de sucesos extraños e inexplicables fueron relatados por los habitantes y policía del área.

En la tarde del día 8 de agosto, a las 17 horas y 13 minutos, un residente de Ashley llamado Johnathan Gabriel dijo haber visto algo extraño en el cielo. Como la pequeña ciudad no poseía una estación oficial de policía, el informe fue hecho a la delegación de la ciudad vecina llamada Hays. Gabriel relató algo que se asemejaba a una “pequeña abertura negra en el cielo”. Quince minutos después, la delegación de Hays se vio inundada con decenas de llamadas de personas que afirmaban haber divisado el mismo fenómeno. A la mañana siguiente un policía fue enviado hasta la ciudad de Ashley para investigar el fenómeno.

A las 7 horas con 53 minutos, en la mañana del 9 de agosto, el oficial de policía de Hays, Allan Mace, se comunicó a la base por radio. Informo que, a pesar de haber seguido correctamente la carretera que llevaba hasta Ashley, se había perdido. De acuerdo con su informe, la carretera “continuaba con el camino normal, pero de alguna forma acababa nuevamente en Hays”. Mace también dijo que la carretera nunca hacía curvas o doblaba en alguna dirección. A las 9 horas y 15 minutos, un total de diez patrullas de policía fueron enviadas para investigar la situación, y todos los miembros del equipo llegaron a la misma conclusión que Allan Mace. La carretera que antes llevaba hasta Ashley se había convertido en un camino de retorno a Hays. Las llamadas a la delegación de Hays continuaban, informando que la grieta negra en el cielo se hacía más grande. A todos los que llamaban se le hacía la recomendación de permanecer al interior de sus hogares y no salir a no ser que fuera absolutamente necesario. A las 20 horas con 17 minutos, la Sra. Elaine Kantor informó que el Sr. y la Sra. Milton así como sus dos hijos habían desaparecido. Según la llamada de la Sra. Kantaro, la familia Milton había intentado salir de la ciudad en automóvil aquella misma tarde. Ellos nunca volvieron. Los policías nunca divisaron carro alguno o personas en la carretera.


La mañana del 10 de agosto de 1952, las llamadas a la delegación de Hays desde la ciudad de Ashley relataban que la ciudad se encontraba en total oscuridad. El Sol simplemente no había salido. A las 10 horas y 15 minutos, a petición de la policía de Hays, un helicóptero de la ciudad de Topeka sobrevoló la región donde se situaba la ciudad de Ashley. No fue posible visualizar la ciudad desde el cielo.

El día 11 de agosto, a las 12 horas y 43 minutos, la Sra. Phoebe Danielewski llamó a la delegación de Hays. Informó que su hija Erica había comenzado a entablar una conversación con su padre, que había muerto tres años antes, en un accidente de tráfico. Lo que más la preocupada era que Erica estaba intentando salir de la casa hacia la oscuridad para, según sus propias palabras, “estar juntos”. En las siguientes doce horas, la delegación de Hays recibió 329 llamadas describiendo un fenómeno casi idéntico al de Erica, todas involucraban a niños.

A la mañana siguiente, el día 12 de agosto de 1952, la situación se volvió aun peor. Durante la noche, los 217 niños de la ciudad de Ashley desaparecieron. Se registraron un total de 421 llamadas hacia la delegación de Hays. Como los policías no lograban llegar a la ciudad de Ashley, la única indicación que daban a los padres era que permanecieran en el interior de sus hogares y que no intentaran buscar a los niños desaparecidos.


A las 17 horas del día 13 de agosto, un anciano llamado Scott Luntz informó de un incendio distante que crecía proviniendo del sur de Ashley. Según la descripción, el fuego parecía hacer que la oscuridad se tornara de un “rojo fuerte y naranja, que parecía subir hasta el cielo”. Durante ese día las llamadas continuaron llegando, diciendo que el fuego, que se movía en dirección norte, ahora parecía “provenir del cielo negro”. Ningún incendio fue visto o informado por las comunidades de las ciudades vecinas.

Los informes continuaron hasta las cero horas con 9 minutos de la madrugada del 14 de agosto de 1952, la última llamada de ese día, hecha por el Sr. Benjamin Endicott, relataba que el fuego en el cielo ahora era más intenso, haciendo que la oscuridad ya no cubriera la ciudad. La llamada terminó de forma abrupta.

(Mensaje transcrito de la llamada hecha por el Sr. Benjamin Endicott)

Benjamin: Espere un poco… espere…

– SILENCIO –

Benjamin: Es… es, veo algo. Está en el sur. Parece que es –

– LA LLAMADA SE CORTA –

La próxima llamada no fue hecha sino hasta la tarde siguiente.

En seguida, la transcripción completa de la última llamada recibida por la delegación de Hays proveniente de la ciudad de Ashley. Sucedió a las 21 horas con 26 minutos de la noche del 15 de agosto de 1952. En esta grabación el policía que habla con la mujer identificada como la Sra. April Foster es el oficial Peter Welsch.



–COMIENZO DE LA LLAMADA–

Oficial Welsch: delegación de policía de Hays.

(Estática)

Oficial Welsch: ¿Hola?

Foster: Sí… sí, ¿hola?

Oficial: Señora, ¿con quién estoy hablando?

Foster: Mi nombre es April, April Foster (tose). Por favor señor. Por favor, ayúdeme.

Oficial: ¿Qué pasa señora?

Foster: Ayer en la noche… ayer en la noche ellos volvieron.

Oficial: Señora, necesito que usted…

Foster: ¡AYER EN LA NOCHE ELLOS VOLVIERON! (llorando)

Oficial: Señora, necesito que se calmen y hable con claridad. ¿Qué sucedió? ¿Quién volvió?

Foster: (sollozando) Todos.

Oficial: ¿Todos?

Foster: Todos volvieron del fuego.

Oficial: ¿Cómo qué todos?

Foster: Mi hijo… vi a mi hijo volver en la noche. Estaba caminando… caminaba por la calle. Se está quemando. Jesucristo ¡SE ESTABA QUEMANDO!

Oficial: Señora, yo…

Foster: Él murió el año pasado. Lo crie sola desde bebé… solo él y yo. Le dije que tuviera cuidado con los carros cuando anduviera en bicicleta, pero nunca me escuchaba.

Oficial: Señora, lo que está diciendo no tiene ningún sentido. ¿Me dijo que todos habían vuelto?

Foster. ¿ME ESTÁS ESCUCHANDO IDIOTA? ¡TODOS! Todos han regresado. Todos los que murieron o desaparecieron, volvieron. Están detrás de nosotros (llorando). Él… él dice: “Mamá estoy bien ahora. Mira, puedo caminar de nuevo. Donde estás mamá, te quiero ver”.

Oficial: Señora, ¿Dónde se encuentra ahora? ¿Está segura?

Foster: Estoy escondida. Como todo el mundo. Los vimos viniendo de los campos… y… algunas personas les abrieron las puertas. Dios, ¡LOS GRITOS! –Pausa– No sé lo que pasó con ellas. Pero sus casas se incendiaron y se desmoronaron. Estoy con las cortinas abajo. Estoy escondida en mi armario ahora y –Silencio–

Oficial: Señora, ¿está todo bien? ¿Se encuentra bien?

Foster: –Silencio–

Oficial: ¿Señora?

Foster: –Ruido de un cristal rompiéndose– ¡Ah… ah mi Dios!

Oficial: ¿Señora?

Foster: Algo acaba de entrar –llanto débil–

Oficial: Señora, quédese lo más quieta que pueda. No hable.

Foster: – sonido débil – “¿Mamá… mamá?” – llanto de Foster – Él entró.

Oficial: Permanezca donde está. No salga.

Foster: – sonido débil – “¿Mamá, te estás escondiendo?”

Oficial: Permanezca en silencio.

Foster: – Sonidos de pasos. Risas. – “¡TE ENCONTRÉ MAMÁ!” – Gritos –.

Oficial: ¿Señora?

– LA LLAMADA TERMINA–

A la mañana siguiente a las 6 horas y 55 minutos los policías de Hays lograron dar con el paradero de la ciudad de Ashley, pero ya estaba en una grieta debajo de la tierra, ardiendo en llamas.