Según el Biólogo Molecular Peter Duesberg (virólogo de reputación mundial) de la Universidad de Berkeley en California, el retrovirus del VIH no puede ser la causa del SIDA por que los retrovirus no tienen mecanismos para matar células, no son citotóxicos vivimos en armonía con infinidad de retrovirus dentro del cuerpo es decir viven inocuos en nosotros.
Y el Dr. Stefan Lanka va a mas allá al decirnos que hasta se duda de la existencia del virus del VIH al no haberse aislado y purificado según los postulados de KOCH.
La biofísica Eleni Papadopulos-Eleopulos, y su grupo de investigación del Hospital Real de Perth, en el occidente de Australia, fueron los primeros científicos en mencionar el hecho de que el VIH jamás ha sido aislado. Por varios años Papadopulos-Eleopulos y sus compañeros han estado publicando artículos en los cuales describen con lujo de detalles los hechos científicos que sustentan como "el denominado virus del SIDA o VIH ni siquiera parece que exista":
El procedimiento correcto empleado durante más de medio siglo para lograr el aislamiento de un retrovirus es el siguiente:
a) Encontrar en las células de cultivo infectadas partículas con un diámetro de 100-120nM y que contengan los denominados cuerpos internos o coraza y que su superficie se encuentre cubierta de espículas.
b) Que estas partículas formen una banda de sedimentación a una densidad de 1.16 gm/ml de sucrosa.
c)En la banda de densidad de 1.16mg/ml no debe haber nada diferente a las partículas con las características morfológicas de una partícula retroviral.
d) Las partículas deben contener sólo ARN y no ADN, y el ARN debe tener consistentemente el mismo tamaño [número de bases] y composición, no importando las veces que el experimento se repita.
e) Cuando las partículas son introducidas en cultivos secundarios, ellas son tomadas por las células del cultivo, el ARN celular, y luego ADN es transcrito de nuevo a ARN el cual es entonces traducido en proteinas.
f) Como resultado, las células de estos cultivos secundarios liberan partículas al medio de cultivo.
g) Las partículas liberadas al medio de cultivo secundario deben tener exactamente las mismas características de la partícula original, y por lo tanto deben ser morfológicamente idénticas, sedimentar a 1.16 gm/ml y deben contener las mismas proteínas y el mismo ARN que la partícula original.
Ninguno de estos pasos se ha logrado en el caso del VIH
Ninguno de los investigadores que afirman haber aislado al VIH han mostrado la presencia de partículas con las características morfológicas de retrovirus y que hayan sedimentado a 1.16 mg/ml de sucrosa.
La palabra "aislamiento", utilizada por la mayoría de los investigadores es incorrecta y crea confusión. Ni Montagnier, ni Gallo, ni Levy, aislaron partículas de VIH, ni partículas de algún otro retrovirus y ni siquiera aislaron partícula viral alguna.
Puesto que en el caso del SIDA ninguna "partícula retroviral" [retrovirus] ha sido alguna vez aislada de cultivo alguno, la existencia del VIH ha sido establecida en forma indirecta: por la presencia de los co-cultivos de sangre de individuos con SIDA o de sangre de individuos "VIH positivos", proteínas/glicoproteínas tales como gp160/150, gp120, gp45/41/40, p34/32, p24/25 y p18/17, todas supuestamente pertenecen al VIH, por la presencia de enzimas tales como la transcriptasa reversa que supuestamente pertenece al VIH, y por la presencia de fragmentos de ARN o de ADN que supuestamente también pertenecen al VIH.
Sin embargo, nunca se ha demostrado que alguna de estas sustancias haga parte del VIH. No es posible demostrar que las sustancias encontradas en los cultivos pertenezcan a una partícula viral que jamás ha sido vista a una densidad de 1.16gm/ml. Para demostrar que estas sustancias hacen parte de un retrovirus denominado VIH, es absolutamente necesario que dicho retrovirus haya sido previamente aislado o separado de cualquiera otra cosa. Esto jamás ha ocurrido en el caso del VIH.
Es interesante anotar que las sustancias enumeradas en el numeral 3.3. se asegura que aparecen exclusivamente cuando se co-cultiva sangre supuestamente infectada con el VIH y células anormales de pacientes leucémicos o linfocitos del cordón umbilical. El problema es que las mismas sustancias pueden obtenerse de los mismos cultivos en ausencia de la sangre supuestamente infectada con el VIH.
Los cultivos donde se encuentran las sus tancias arriba descritas, son cultivos que han sido intensamente estimulados con fitohemaglutinina, interleukina 2, antisuero contra interferon humano y con otros agentes. Estos estimulantes de cultivo son agentes oxidantes. El problema es que el mismo tipo de material puede encontrarse en cultivos de linfocitos de personas normales, siempre y cuando estos sean estimulados con los mismos agentes.
Es interesante anotar que la presencia de antioxidantes en los cultivos evita que aparezca el fenómeno VIH.
Las sustancias enumeradas en el numeral 3.3. de ninguna manera son específicas del VIH. Por ejemplo, se acepta en la actualidad que la transcriptasa reversa puede estar asociada a muchas otras entidades diferentes a retrovirus, incluyendo a células eucariotas, a algunos vierus ADN de plantas y animales, e inclusive a algunos intriones.
Gallo y sus compañeros aseguran que el sobrenadante libre de células de los cultivos "infectados" contiene ADN del VIH. Se olvidan ellos que, por definición, los retrovirus son partículas infecciosas que contienen sólo ARN. Cuando los retrovirus entran a la célula su ARN es transcrito en forma reversa a ADN, el cual es a su vez integrado al ADN celular como un provirus, lo cual significa que el "ADN del VIH" sólo puede estar presente dentro de la célula huésped y no en ninguna otra parte.
También existe evidencia de que el ARN o el ADN presentes en el sobrenadante de los cultivos sean un efecto de la estimulación por policationes y agentes oxidantes, antes que indicar allí la presencia de un retrovirus.
"La clonación del VIH" no tiene sentido. Sin haber aislado una partícula retroviral que contenga dentro de su coraza al ARN, la clonación de un "ARN específico del VIH" no es posible.
Hasta el presente nadie ha demostrado evidencia alguna de que las denominadas proteínas o antígenos del VIH[gp160/150, gp120, gp41/45/40, p34/32, p24/25, p18/17] sean constituyentes del VIH, de una partícula retroviral o que al menos sean parte de una partícula viral cualquiera.
Las proteínas y antígenos provenientes de cultivos estimulados constituyen la base para "las pruebas de anticuerpos antiVIH": ELISA y Western blot. Los fragmentos de ARN provenientes de cultivos estimulados constituyen el fundamento de la prueba de la carga viral del VIH. Esta es la razón primordial por medio de la cual las pruebas usadas en la actualidad en el diagnóstico de la "infección VIH", no son específicas para ello.
En la revista "Virology" de febrero de 1997, dos grupos diferentes de investigadores publicaron los resultados de experimentos por medio de los cuales aseguraban haber aislado el VIH. Al fin y por primera vez en la historia del VIH, los investigadores siguieron los pasos aceptados internacionalmente para el aislamiento de partículas retrovirales. Sin ninguna sorpresa, en la banda sedimentada a 1.16gm/ml de sucrosa, donde se sabe sedimentan los retrovirus, lo único que se encontró fueron restos celulares. A 1.16 gm/ml no había nada que se pareciera a una partícula retroviral. Los investigadores no pudieron aislar al VIH, simplemente porque el VIH no estaba allí para ser aislado.
Se ha propuesto que todas aquellas sustancias que indican indirectamente la existencia del VIH, no sean material viral, sino que sean sustancias inducidas por los agentes a los cuales las personas "seropositivas", los enfermos de SIDA o los cultivos se han expuesto. Cuando se encuentran en las personas, estas sustancias hacen parte de los efectos químicos regulares de la respuesta al estrés, secundarios a las exposiciones a agentes estresantes de origen químico, físico, biológico, mental y nutricional.
Es por lo tanto posible concluir que todo el modelo del SIDA como una enfermedad infecciosa, viral y contagiosa, tiene su base en un organismo inexistente. Es decir, que el fundamento de toda la concepción viral del SIDA es un fantasma.
La biofísica Eleni Papadopulos-Eleopulos, y su grupo de investigación del Hospital Real de Perth, en el occidente de Australia, fueron los primeros científicos en mencionar el hecho de que el VIH jamás ha sido aislado. Por varios años Papadopulos-Eleopulos y sus compañeros han estado publicando artículos en los cuales describen con lujo de detalles los hechos científicos que sustentan como "el denominado virus del SIDA o VIH ni siquiera parece que exista":
El procedimiento correcto empleado durante más de medio siglo para lograr el aislamiento de un retrovirus es el siguiente:
a) Encontrar en las células de cultivo infectadas partículas con un diámetro de 100-120nM y que contengan los denominados cuerpos internos o coraza y que su superficie se encuentre cubierta de espículas.
b) Que estas partículas formen una banda de sedimentación a una densidad de 1.16 gm/ml de sucrosa.
c)En la banda de densidad de 1.16mg/ml no debe haber nada diferente a las partículas con las características morfológicas de una partícula retroviral.
d) Las partículas deben contener sólo ARN y no ADN, y el ARN debe tener consistentemente el mismo tamaño [número de bases] y composición, no importando las veces que el experimento se repita.
e) Cuando las partículas son introducidas en cultivos secundarios, ellas son tomadas por las células del cultivo, el ARN celular, y luego ADN es transcrito de nuevo a ARN el cual es entonces traducido en proteinas.
f) Como resultado, las células de estos cultivos secundarios liberan partículas al medio de cultivo.
g) Las partículas liberadas al medio de cultivo secundario deben tener exactamente las mismas características de la partícula original, y por lo tanto deben ser morfológicamente idénticas, sedimentar a 1.16 gm/ml y deben contener las mismas proteínas y el mismo ARN que la partícula original.
Ninguno de estos pasos se ha logrado en el caso del VIH
Ninguno de los investigadores que afirman haber aislado al VIH han mostrado la presencia de partículas con las características morfológicas de retrovirus y que hayan sedimentado a 1.16 mg/ml de sucrosa.
La palabra "aislamiento", utilizada por la mayoría de los investigadores es incorrecta y crea confusión. Ni Montagnier, ni Gallo, ni Levy, aislaron partículas de VIH, ni partículas de algún otro retrovirus y ni siquiera aislaron partícula viral alguna.
Puesto que en el caso del SIDA ninguna "partícula retroviral" [retrovirus] ha sido alguna vez aislada de cultivo alguno, la existencia del VIH ha sido establecida en forma indirecta: por la presencia de los co-cultivos de sangre de individuos con SIDA o de sangre de individuos "VIH positivos", proteínas/glicoproteínas tales como gp160/150, gp120, gp45/41/40, p34/32, p24/25 y p18/17, todas supuestamente pertenecen al VIH, por la presencia de enzimas tales como la transcriptasa reversa que supuestamente pertenece al VIH, y por la presencia de fragmentos de ARN o de ADN que supuestamente también pertenecen al VIH.
Sin embargo, nunca se ha demostrado que alguna de estas sustancias haga parte del VIH. No es posible demostrar que las sustancias encontradas en los cultivos pertenezcan a una partícula viral que jamás ha sido vista a una densidad de 1.16gm/ml. Para demostrar que estas sustancias hacen parte de un retrovirus denominado VIH, es absolutamente necesario que dicho retrovirus haya sido previamente aislado o separado de cualquiera otra cosa. Esto jamás ha ocurrido en el caso del VIH.
Es interesante anotar que las sustancias enumeradas en el numeral 3.3. se asegura que aparecen exclusivamente cuando se co-cultiva sangre supuestamente infectada con el VIH y células anormales de pacientes leucémicos o linfocitos del cordón umbilical. El problema es que las mismas sustancias pueden obtenerse de los mismos cultivos en ausencia de la sangre supuestamente infectada con el VIH.
Los cultivos donde se encuentran las sus tancias arriba descritas, son cultivos que han sido intensamente estimulados con fitohemaglutinina, interleukina 2, antisuero contra interferon humano y con otros agentes. Estos estimulantes de cultivo son agentes oxidantes. El problema es que el mismo tipo de material puede encontrarse en cultivos de linfocitos de personas normales, siempre y cuando estos sean estimulados con los mismos agentes.
Es interesante anotar que la presencia de antioxidantes en los cultivos evita que aparezca el fenómeno VIH.
Las sustancias enumeradas en el numeral 3.3. de ninguna manera son específicas del VIH. Por ejemplo, se acepta en la actualidad que la transcriptasa reversa puede estar asociada a muchas otras entidades diferentes a retrovirus, incluyendo a células eucariotas, a algunos vierus ADN de plantas y animales, e inclusive a algunos intriones.
Gallo y sus compañeros aseguran que el sobrenadante libre de células de los cultivos "infectados" contiene ADN del VIH. Se olvidan ellos que, por definición, los retrovirus son partículas infecciosas que contienen sólo ARN. Cuando los retrovirus entran a la célula su ARN es transcrito en forma reversa a ADN, el cual es a su vez integrado al ADN celular como un provirus, lo cual significa que el "ADN del VIH" sólo puede estar presente dentro de la célula huésped y no en ninguna otra parte.
También existe evidencia de que el ARN o el ADN presentes en el sobrenadante de los cultivos sean un efecto de la estimulación por policationes y agentes oxidantes, antes que indicar allí la presencia de un retrovirus.
"La clonación del VIH" no tiene sentido. Sin haber aislado una partícula retroviral que contenga dentro de su coraza al ARN, la clonación de un "ARN específico del VIH" no es posible.
Hasta el presente nadie ha demostrado evidencia alguna de que las denominadas proteínas o antígenos del VIH[gp160/150, gp120, gp41/45/40, p34/32, p24/25, p18/17] sean constituyentes del VIH, de una partícula retroviral o que al menos sean parte de una partícula viral cualquiera.
Las proteínas y antígenos provenientes de cultivos estimulados constituyen la base para "las pruebas de anticuerpos antiVIH": ELISA y Western blot. Los fragmentos de ARN provenientes de cultivos estimulados constituyen el fundamento de la prueba de la carga viral del VIH. Esta es la razón primordial por medio de la cual las pruebas usadas en la actualidad en el diagnóstico de la "infección VIH", no son específicas para ello.
En la revista "Virology" de febrero de 1997, dos grupos diferentes de investigadores publicaron los resultados de experimentos por medio de los cuales aseguraban haber aislado el VIH. Al fin y por primera vez en la historia del VIH, los investigadores siguieron los pasos aceptados internacionalmente para el aislamiento de partículas retrovirales. Sin ninguna sorpresa, en la banda sedimentada a 1.16gm/ml de sucrosa, donde se sabe sedimentan los retrovirus, lo único que se encontró fueron restos celulares. A 1.16 gm/ml no había nada que se pareciera a una partícula retroviral. Los investigadores no pudieron aislar al VIH, simplemente porque el VIH no estaba allí para ser aislado.
Se ha propuesto que todas aquellas sustancias que indican indirectamente la existencia del VIH, no sean material viral, sino que sean sustancias inducidas por los agentes a los cuales las personas "seropositivas", los enfermos de SIDA o los cultivos se han expuesto. Cuando se encuentran en las personas, estas sustancias hacen parte de los efectos químicos regulares de la respuesta al estrés, secundarios a las exposiciones a agentes estresantes de origen químico, físico, biológico, mental y nutricional.
Es por lo tanto posible concluir que todo el modelo del SIDA como una enfermedad infecciosa, viral y contagiosa, tiene su base en un organismo inexistente. Es decir, que el fundamento de toda la concepción viral del SIDA es un fantasma.
2 comentarios:
Y que sucede con el post anterior sobre ésto??
Salud.
Se trata de diferentes puntos de vista
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